La imputación es el acto de comunicar a alguien que se le atribuye un hecho penal. En el sistema adversarial, se pueden presentar defensas antes de la imputación formal. La presentación espontánea permite designar defensa y realizar un descargo. Esto influye en la pena en caso de condena. El imputado tiene derechos desde la detención, incluyendo el derecho a un abogado y a no autoincriminarse. Los antecedentes afectan la prisión preventiva y la condena. Se requiere un examen médico para determinar la capacidad de comprensión del imputado. Durante el juicio oral, se le da la oportunidad de declarar y expresar sus últimas palabras.